Ana María Alfaro, lejos de las tablas y los grandes éxitos que realizó con su marido, Jaime Kloner, a través del radio-teatro, hoy se ha transformado en un “ícono” de Villa Carlos Paz, donde fue la pionera en transmisiones radicales.
Esta temporada es la número 30 con sus tradicionales puestos radiales desde el microcentro de la Villa serrana en temporada. Desde las 11,30 y hasta las 13,30 encabeza un importante equipo de profesionales, pudiendo ser escuchada por la potente señal de LW1 Radio Universidad AM 580.
Alfaro no sólo es un referente del espectáculo, sino también de las comunicaciones y el periodismo. Desde hace 20 años, junto a su familia, conducen “Ana María y la gente”, toda una “marca” dentro de la televisión del interior del país.
Optimista por naturaleza, sagaz, coqueta, dotada de una memoria prodigiosa y una calidez inigualables, todos los artistas la aman y “desfilan” por su espacio radial. Y también el público: la adoran y aunque no se sorprende, se ríe cuando la comparan con el Cu Cú o la Aerosilla, por su importancia.
En un extenso diálogo con el Semanario La Jornada, siempre con su sonrisa el rostro, habló de todo. Calificó de “fenómeno popular” a la Mole Moli, no le gusta Ricardo Fort, dijo que no dejará de trabajar nunca y que coincide en calificar a esta temporada como una de las mejores de la historia de Villa Carlos Paz.
¿Muchas voces dicen que esta temporada es la mejor en 30 años: ¿Comparte esta opinión?
Es la mejor, sin dudas. Para mi, lo que yo veo, es maravilloso. Nunca se ha visto tanta gente. Tanta ocupación, ya muchos que muchos hablan de un 100% y eso es fantásticos.
Además, siento, percibo, que estamos contagiados todos de optimismo. Y eso ojalá nos dure y que no sea sólo para un verano. Creo que estamos viviendo lo mejor de los últimos años.
¿Ese podría ser el rasgo en esta temporada, que la gente está más optimista y más esperanzada?
Así es, se siente mucho eso, la gente esta esperanzada, hay como una “liberación” en la gente. Veo que los turistas toman decisiones, tengo unos pesos y los gasto. Para disfrutar y que después, Dios nos ampare. Hay ganas de vivir y eso es muy importante.
¿Usted es un referente del teatro, que opina del nivel de este año en las obras?
Todo lo que he visto hasta ahora es bárbaro. Fui a ver “El gran show”, con la Mole Moli, Mateyco, El Puma Rodríguez, Carmen Flores (mi amiga de toda la vida), en fin, me pareció maravilloso.
También fui a ver Taxi y me encantó. Pero también fui a ver espectáculos más chicos, como el del Chango Juárez, que está con un enorme crecimiento en su puesta. Todos y cada una estamos poniendo de nuestra parte para crecer a la par de Carlos Paz.
Es decir, es un nivel parejo, han crecido todos…
Y hay un crecimiento en el ánimo de la gente. Antes, cuando llegaban, venían a lo sumo con lo justo para ver una obra. Ahora es distinto, les aseguro que hay familias que llegan al hotel y dicen: Ahorré todo el año y voy a ver todas las obras. Y es así, tal cual. Si están diez días, van a ver diez obras teatrales. Lo digo porque me consta.
¿Y cómo ves que haya empresarias que estén invirtiendo en nuevas salas teatrales?
La sala que va a estar en el centro, va a ser maravillosa, va a tener 1.200 localidades. Empresarios jóvenes como Eduardo Giordano y Miguel Pardo o los hermanos Neira, con el Teatro Melos (donde antes esta La Sombrilla). Son todas posibilidades que tenemos para hacer de esto y con una gran diferencia, la capital del teatro. Y estoy orgullosa de eso, porque de alguna manera, poquito, mucho o nada, me siento como el granito de arena que ayudó a hacer todo esto.
¿Qué siente cuando al referirse a usted, muchos la comparen con íconos como el Cu Cú o la Aerosilla?
(Risas) Digamos que me siento querida y eso para mí es lo importante. En la vida Dios impone una sola cosa, quiere que sus hijos sean felices. Y yo aquí soy muy feliz. Soy feliz por lo que hago, por lo que siento y por lo que vivo. El cariño de la gente es lo que me impulsa a seguir. Esto es como un vicio muy grande. Una sana adicción.
¿Evaluó alguna vez no hacer temporada, descansar o retirarse?
Esto tiene que seguir. Ya descansaré cuando Dios diga y será para partir. Si Dios me da vida y salud, voy a trabajar siempre.
¿Cómo ves el fenómeno de la Mole Moli?
Como un fenómeno social muy grande. Único en los últimos tiempos. Lo que despierta ese hombre no me alcanzan las palabras para describirlo. Es cariño, admiración y tantas cosas más. Es un hombre que ahora está en el teatro y en el espectáculo, pero viniendo del boxeo, el otro extremo, donde hay rudeza, agresividad y hasta brutalidad. Sin embargo él ha sabido ganarse a la gente de una manera increíble. Como se dicen comúnmente, se los metió a todos en el bolsillo. O mejor aún: Se los metió en el corazón.
Cuando estuvo conmigo, en el puesto de transmisión de Radio Universidad, levantó en sus brazos y saludó a cada uno de los niños, sin importar color, edad, ni nada. Sin Barreras. A él lo aman todos.
¿Este fenómeno es similar al de Ricardo Fort?
No es de mi gusto ni de mi preferencia. No quiero a la gente que se cree que está en el pináculo del mundo y que desprecia a los demás. Realmente no sé si tiene alguna calidad artística. Porque este personaje produce, al menos en mi un rechazo. Y mirá que yo acepto y quiero a todos. Pero hay algo que me tira para atrás con él. Es otro fenómeno, que ha querido imponerlo a través de sus millones.
¿Qué habría que hacer para tener una mejor Carlos Paz para todos?
No tiene que faltar el agua. Hay que lograr hacer las cloacas para todos, para así conseguir el bienestar de la gente, que a su vez recibe a la gente que nos elige para vacacionar.
Tenemos que mostrar a través de educación y de servicios una ciudad mejor, un buen lugar para que vacacionen. Porque la gente que viene, sueña todo el año con los 4, 7 o 10 días que vacaciona aquí, por lo tanto tenemos que darles lo mejor. Que esto sea un vergel. Así como ediliciamente lo están poniendo tan hermoso, porque hay luces, porque hay costanera, entretenimientos, teatro y restaurantes. Lo pequeño que puede faltar, tendrá que hacerlo, quien le toque ser el futuro intendente. Y ojalá que piense en la gente y este paraíso terrenal que es Carlos Paz y que si queremos buscar otro lugar similar en el mundo, no lo encontraremos.
¿Qué le pedirías al destino o a Dios?
Que todos sean felices, que todos logren ese poquito de tranquilidad y felicidad, que por Ley nos pertenece. Que pueda seguir amando a mi familia, que pueda seguir consiguiendo amigos y que yo pueda seguir poniéndole a mis programas: Ana María y la gente.
¿Vas a seguir haciendo televisión?
Si, nosotros en ese sentido somos conservadores. Nos gustaría mantener el horario y volver a las 2 de la tarde. Y me acompañará mi hijo, que deja su lugar, sus ocupaciones (él es abogado, profesor) y me siguen acompañando, me produce. Es un gran apoyo Sergio Kloner. Pero también, desde algún lugar, mi hijo mayor Gabriel, también me apuntala.
¿Cómo se siente en Radio Universidad?
Muy bien, muy cómoda. Es gente muy justa y los SRT son muy prestigiosos. Como siempre, hay altibajos, pero uno siempre rescata lo bueno, son gente maravillosa y yo me siento muy bien con ellos.
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