martes, 1 de noviembre de 2016

Periodismo científico 

La compleja tarea de procesar el conocimiento 

para la gente 


El Instituto de Extensión, de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM) invitó hace unos días a la destacada comunicadora Nora Bär a disertar sobre su especialidad: el periodismo científico. El encuentro fue una suerte de anticipo a lo que será el VI Congreso internacional de comunicación pública  de la ciencia y la tecnología,  Copuci 2017, “Política, Ciencia, Tecnología y Ciudadanía”, a desarrollarse en septiembre de 2017.  
¿Cualquier comunicador puede ejercer el periodismo científico? Si un cronista de deportes se introduce en el ambiente de la farándula o uno de política salta a la actualidad policial, ¿no puede hacer lo mismo un periodista dedicado a difundir las novedades de la ciencia y el conocimiento?  
Estas dudas se desprenden del propio imaginario de algún que otro cronista, pero en verdad el rol de estos comunicadores especializados en temas científicos es mucho s importante de lo que se cree. 
Una de la profesionales que más sabe de esto es Nora BärY desde las páginas del centenario diario La Nación (de Buenos Aires) tiene el gran desafío de dirigir un equipo que se dedica a la ardua tarea de transformar en simple y claro las más sofisticadas novedades de la ciencia. 
Recientemente, Bär, visitó la ciudad de Villa María donde disertó sobre el rol de su actividad. Y lo hizo ante un atento auditorio, en el salón principal del Rectorado de la Universidad Nacional de Villa María (UNVM). 
Previamente conversó con los enviados especiales que acudieron al evento: 

¿Cómo se encuentra la actividad? se podría decir que está en auge el periodismo científico? 
Si bien cada vez hay mas novedades, lamentablemente los diarios no han mantenido sus planteles de estos periodistas especializados. O los han reducido. Es una tendencia mundial, incluso en países como Estados Unidos, algunos colegas se quejan por la reducción de los planteles de ciencia. 
Paradójicamente, encuestas especializadas arrojan que cada vez hay mas interés de la gente en notas científicas. 
Por ejemplo, los temas que más se buscan la gente por internet son los relacionados con la salud, están a tope. Las noticias de ciencia atraen mucho a los lectores. Estudios del New York Times encontraron que los lectores dicen estar muy interesados en las notas científicas. Por otro lado si uno las mide por buscadores o ingresos a internet no son las más leídas. Depende de los parámetros que se usen para evaluar cual es el interés del publico en esta temática.... y eso es muy difícil de establecer. 
Por ejemplo, el verano pasado, una de las notas más vistas en internet de La Nación era una sobre los mejores escotes del verano; pero una cosa es que uno haga un click para una vista superficial y otra muy distinta es un interés más profundo para que una persona lea la nota completa o acceda para estar informado sobre estos temas. 
Es una discusión en marcha, en el ambiente del periodismo y justamente es un debate que nos debemos los periodistas, sobre cómo enfrentar la comunicación de la ciencia: si debe ser comunicada en forma celebratoria, es decir congraciarse con los grandes descubrimientos o debemos mostrarla como realmente es, como una empresa humana, con disputas, con buena práctica, con mala práctica, pero que mal o bien tiene una importancia fundamental en cada de una de las decisiones que se toman en ese ámbito. 

¿A su entender, cuál es la función del periodista científico en la sociedad? 
Como periodistas, lógicamente siempre la misión es informar. En el caso de la ciencia tiene características especiales, porque muchas veces informamos sobre temas abstrusos, que no son comprendidos por la mayoría de la gente y otras veces somos simplemente caja de resonancia de los descubrimientos para contar los resultados a los que se arribó. 
Los periodistas estamos justo en el medio entre la comunidad científica y la sociedad. Tenemos que ponernos en el lugar de la persona no entrenada, transmitir esos nuevos conocimientos que muchas veces ni los propios científicos cuando no son del mismo campo entienden. Nosotros podemos informarlos en forma adecuada, pero además darles las herramientas a las personas que se acercan a este tipo de informaciones para poder interpretarlas. Eso por un lado y por el otro, al menos desde mi visión personal, nuestra tarea no termina ahí, sino que también tenemos la posibilidad y deberíamos tomarlo como una responsabilidad, la tarea de transferir o discutir los rudimentos del pensamiento cientifico, es decir no sólo un resultados sino como se llegó al mismo y de ese modo estamos contribuyendo a dar los elementos a nuestro público de lo que es el pensamiento crítico, que es el que rige la ciencia. Aquí no existe o al menos no debería existir el principio de autoridad, donde nada vale si no hay pruebas objetivas que lo demuestren, donde tal vez un becario si tiene las evidencias objetivas suficientes puede tener tanto peso como el jefe de un instituto y una cantidad de normas por las que se rige la ciencia; que cada trabajo es revisado por pares; cada resultado debe verificarse y reproducirse para que tenga validez y que si se adoptaran por la sociedad en conjunto  también ayudarían a que nosotros estuvramos mejor preparados para tomar decisiones con respecto a innumerables problemas que se presentan en la vida cotidiana. Un ejemplo: cuando tenemos que vacunar a nuestros hijos, o bien cuando queremos participar para que la minería a cielo abierto se desarrolle o no, si estamos o no a favor del tracking, etc.. Tomar decisiones como esas significa ser capaces de pensar en forma critica y rigurosa, no rigiéndonos por lo que nos cuenta el vecino o porque haya alguna historia dando vueltas por ahí, sino conocer como se diseñan los estudios, saber que preguntas hacer cuando nos recomiendan un tratamiento y vamos al médico  ... todas esas cosas son hábitos, formas de pensar que nosotros, como periodistas científicos, podemos difundir en el resto de la sociedad. 


¿Cualquiera puede hacer periodismo cienfico? 
No, nosotros tenemos una red de periodistas científicos y como tales defendemos la especialización, incluso hay problemas tan complejos que para un comunicador experimentado, de muchos años de trabajo se puede llegar a incurrir en errores... estamos tratando con gran una cantidad de conocimiento que muchas veces los propios científicos que no están en ese campo son capaces de evaluar. 
Siempre me acuerdo cuando se demostró el ultimo teorema de Fermat. Se trata de un teorema que había sido planteado (y casi demostrado) por un juez francés aficionado a la matemática, hace 350 años. Hasta que Andrew Whiles se enclaustró durante diez años y trabajando solo, en una verdadera tour de force y pudo demostrarlo. Si uno lee el libro de Simon Sigh "el ultimo teorema de Fermat", ahí cuenta como fue el momento en el que se presentó el teorema (en Cambridge, Reino Unido): la demostración tenía 220 ginas y la sala estaba llena de físicos y matemáticos llegados de todas partes del mundo, pero dice Singh, sólo un puñado pudo seguirlo. Si eso le pasa a físicos, a profesionales, doctores, que están trabajando en el tema, uno tiene que ser consciente que esta lidiando con un material complejo y que no sólo presenta complejidades técnicas. Quien no se haya entrenado en matemática superior difícilmente pueda entender, pero a veces, incluso se presentan complejidades que tienen que ver con la bioética, con una gran cantidad de decisiones por la cuales, muchas veces la decisión final no es blanco ni negro, sino gris, porque tiene beneficios y también riesgos. Y la decisión va a haber que tomarla teniendo en cuenta los riesgos y beneficios, porque no es como el caso de la vacunación donde uno ya sabe, hay una historia de décadas y se han erradicado incluso enfermedades gracias a ello y no darle crédito a estas movidas anti-vacunación que han surgido por ahí porque no tienen basamento. En otras cuestiones hay otras divergencias que agregan a la dificultad, aspectos que ni la propia comunidad científica tiene elementos para dictaminar si ciertos avances son beneficiosos o no, como el caso de la clonación y hasta dónde hay que llegar. Tal es el caso, por ejemplo, de la nueva técnica de edición del genoma humano, donde las propias descubridoras plantearon que ahora, al tener una técnica muy poderosa y económica que en teoría puede permitir editar totalmente el genoma de las personas, por lo tanto al ser tan poderosa hay que usarla en forma cautelosa. En temas como estos se tienen muchos matices, muchas sutilezas y complejidades que para poder tratarlos requieren una formación. No se puede hablar de un ensayo clínico si uno no sabe cuales son las fases o las  etapas que se necesitan para se pueda aprobar un fármaco, o que para aprobar un fármaco se requieran un cierto número de sujetos de investigación, menos de lo cual no alcanza para aprobar una hipótesis, es decir, se requiere respetar y seguir una gran cantidad de normas para hacer lo que se dice "buena ciencia". 


¿Quién es Nora Bär? 
La periodista es una de las más respetadas y consultadas en su especialidad, el periodismo científico. Es editora de la sección ciencia/salud del diario La Nación (Buenos Aires)Pertenece a la International Science Writers Association y es columnista de varios programas radiales. Conductora del espacio "El Arcó", Radio del Plata AM1030 (Buenos Aires). En 1997 obtuvo el diploma al mérito en divulgación científica otorgado por la Fundación Konex.