Una importante cantidad de vecinos de
Santa Rita del Lago dio un paso más en procura de velar por una mayor seguridad
de este sector residencial, para lo cual instalarán en breve las primeras
alarmas comunitarias.
Así lo definieron en un encuentro
sostenido el jueves último en la sede social de la institución ubicada en calle
Medrano al 400.
Del cónclave participaron representantes
de la Policía Comunitaria de la Unidad Departamental Punilla, el director de
Defensa Civil y Seguridad Ciudadana, Roberto Giménez y los anfitriones, la
comisión directiva en pleno de la entidad barrial, encabezada por Jorge
Abriatta.
En la convocatoria se planteó la
necesidad de enfrentar la inseguridad con un mayor compromiso y solidaridad por
parte de los habitantes del sector.
Jorge Abrietta, responsable de la
entidad barrial explicó que el encuentro
fue el segundo en su tipo realizado en la zona: “Estamos satisfechos porque ahora
tuvimos cerca de ochenta vecinos. La convocatoria ha sido buenísima. Alrededor
de 60 eran los que habían venido en la primera reunión, el resto, una veintena,
eran vecinos que vinieron por primera vez”.
El dirigente vecinal explicó, a modo
de balance, lo ocurrido durante el debate: “Se exhibieron dos muestras de
alarmas comunitarias y la gente se inclinó por un modelo. Así que ya se están
poniendo en campaña para comprarlas”.
En tal sentido una conocida empresa
que vende elementos y accesorios de electricidad (y está sobre Avenida San
Martín), será la encargada de suministrar los artefactos de alarmas
comunitarias a los vecinos, los que serán especialmente atendidos a través de
una lista previa que elaborará el centro vecinal.
“No sé si con esto vamos a evitar la
inseguridad, pero por lo menos será un paliativo. Hace un par de semanas se
registraron un par de hechos preocupantes, fueron asaltos y eso motivó la
preocupación de la gente. Al estar alertas los vecinos acuden al centro vecinal,
nosotros hicimos lo propio a la Unidad Departamental, para lo cual vinieron
integrantes de la Policía Comunitaria, con un resultado muy óptimo”.
Entre los vecinos también fue
planteada en la reunión la cuestión de la iluminación: “Desde el municipio no
estaban muy al tanto de la potencia de los focos. Vamos a trabajar con las
podas, porque hay árboles muy grandes y eso también provoca una mayor
oscuridad”.
Como resultado, quedó planteado un
nuevo cónclave, pautado para el jueves 16 de este mes, donde entre otros
objetivos se analizará ya el “mapa” de las primeras alarmas comunitarias
instaladas.
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