Sopla un nuevo viento norte y viene desde Costa Azul. Es que a partir del miércoles último, quedó proclamada la flamante comisión vecinal de este barrio, que hacía 14 años venía encabezando el dirigente bancario Dady Sillem.
En una breve y discreta asamblea realizada en una de las aulas de la Escuela Manuel Belgrano, el establecimiento educativo público con que cuenta el barrio, se dieron a conocer los nombres de quienes ahora conducirán este centro vecinal, el que está ubicado más al norte del ejido municipal.
El barrio, que en sus comienzos al igual ahora era una única unidad, estuvo por varios años dividido en la fracción Norte y la Sur. Pero entre los logros que se atribuye la comisión saliente, que encabezó Sillem, se cuenta justamente el hecho de volver a juntar las dos secciones, separadas en lo físico por el gigantesco nudo vial de ingreso a la ciudad, donde muere la autopista Allende Posse.
Dos sectores, con viviendas de características residenciales ambos, pero con necesidades diferentes.
Contrariamente a lo que muchos piensan, Costa Azul cuenta aún con calles de tierra. El presidente electo, Marcelo Diez, proclamado por la lista única y consensuada que se presentó en la asamblea ordinaria, vive en una de ellas, Lope de Rueda, que ni siquiera cuenta con cordón cuneta.
Tras ese nivel de vida alto que parecen mostrar algunas fincas, complejos y countries cerrados en este sector, se encuentra una nutrida porción de vecinos que viven en forma permanente y que quieren hacer oír su voz debido a las necesidades que atraviesan.
Calles en mal estado, escasa iluminación, el gas natural que no llega y la falta de una sede social donde funcione el centro vecinal, se cuenta entre las prioridades de la agenda de la nueva comisión barrial.
A simple vista las mayores urgencias se ubicarían en sección Norte, donde el alumbrado público, el gas y los patrullajes policiales llegan hasta las primeras cuadras de Av. Sebastian Bach.
“La Escuela Belgrano no tiene gas natural y el country que está enfrente sí, porque antes de irse Emprigas se lo dio a este complejo”, relata como i fuera una paradoja el nuevo titular de la comisión directiva del centro vecinal, Marcelo Diez.
El nuevo dirigente se lamentó de no poder disponer de la que otrora fuera la sede vecinal barrial (en calle Comechingones al fondo) y que el ex intendente Eduardo Conde terminó donando al Club Argentino de Servicios (CAS).
“Entre las opciones que manejamos para tener un espacio propio estaría la posibilidad de que donde está el CAS nos cedan un cuartito para las reuniones. El problema es que ese lugar tiene 2x5 mts.y no cabemos ni la mitad de la comisión”, se lamentó Diez.
El vecinalista se mostró más esperanzado en cambio en las otras opciones, entre las que se contaría ocupar algunas de las fracciones de un descampado ubicado sobre Lope de Rueda, sobre la continuación de calle Padilla, frente a la rotonda y donde actualmente existe una improvisada cancha de fútbol. Allí se podría construir una oficina o salón vecinal.
“Contar con una sede, un techo propio como centro vecinal será una de nuestras metas y queremos llevarle este pedido incluso al propio intendente para que nos ayude”. Diez reconoció también que la indiferencia del vecino es importante en esta zona: “La sede será para que la gente se acerque y participe, transmita sus reclamos y colabore con el barrio, pero para eso se hace necesario que el vecino se involucre, sino todo será más difícil”.
Entre las prioridades que el sector tiene para resoiver, se cuentan, del lado sur, atender el reclamo de un frentista quien habría manifestado en su momento que no estaría permitido el funcionamiento de un corralón-venta de ladrillos (sobre Av. San Martín) que sigue instalado en la zona (y está muy cerca de su casa).
En el área norte, en tanto, la lista es más larga. “El municipio debe instalar un alumbrado público cada 50 metros. Y en nuestro barrio son muy pocas cuadras en la que se respeta eso. Sabemos que el alumbrado naranja, ubicado en el sector sur, cada 30 metros, fue costeado por los propios vecinos, pero el municipio debería responder y hacerse cargo en los sectores donde ni siquiera tenemos alumbrado cada 100 metros”, se lamentó.
Respecto al gas natural que no llega, se mostró sorprendido, ya que en los últimos tiempos las respuestas, las cuales definió como “excusas” fueron variadas. “Mientras la red avanza hacia el sur, para este otro lado se nos dijo, primero, que no podían cruzar Bach porque era una ruta provincial, después aseguraron que había pocos adherentes y finalmente escuchamos que era por problemas de presión. Nos gustaría que se pongan de acuerdo y que se acuerden que prometieron que el gas natural se iba a completar en Costa Azul”.
Respecto a la seguridad, admitió que desde hace tiempo no se escuchan graves hechos contra la propiedad y los vecinos, aunque si dijo que al menos desde hace dos meses “casi no se ve el patrullero”, circular por la zona.
Se lamentó, en otro orden, que a raíz de las obras por la “cloaca máxima”, algunos tramos que se rompieron de Av. Bach quedaron deteriorados y si bien se llegó a admitir las fallas, la promesa de una repavimentación, nunca llegó.
Unida a la cuestión de las cloacas, Marcelo Diez también expresó su preocupación por un arroyo que atraviesa el barrio y cruza por Lope de Rueda: “El agua es cada vez más color marrón y se supone que una vertiente natural no puede tener una coloración así. Estamos muy asustados porque sospechamos que se trata de líquidos contaminantes, aunque no sabemos si cloacales o de lo contrario que provengan desde la zona del basural. Y llamativamente, siempre a las siete de la tarde sube el cauce. Es como si a esa hora el arroyo creciera o bien fueran vertidos los líquidos desde algún lugar”.
Mientras la nueva conducción espera la oficialización municipal de la lista única presentada, para de esta forma iniciar a trabajar por el barrio, se anticipó que la próxima reunión (a la cual están especialmente invitados todos los vecinos), será el lunes 22 de setiembre próximo, a las 19 horas, en el Hotel El Molino.
MAS DE DIEZ…
Acompañan a Marcelo Diez en la presidencia de la comisión directiva, Eugenio Zecchin en la vicepresidencia, Roxana Corradi como secretaria, Daniel Velázquez como prosecretario, Raúl Flores tesorero, Agustín Flores protesorero, Daniel Mottola como 1º vocal titular, Norma Yánez 2º vocal titular, Lorena Blanco 3º vocal titular, Nélida Cocordano 4º vocal titular, Claudio Alcaniz 1º vocal suplente, Pablo Gentile 2º vocal suplente, Gabriela Contesso 3º vocal suplente y Mirta Manquilef 4º vocal suplente. En la Comisión Revisora de Cuentas están: Beatríz Locurero, Rubén Petrucelli y Jorge Montenegro.
En una breve y discreta asamblea realizada en una de las aulas de la Escuela Manuel Belgrano, el establecimiento educativo público con que cuenta el barrio, se dieron a conocer los nombres de quienes ahora conducirán este centro vecinal, el que está ubicado más al norte del ejido municipal.
El barrio, que en sus comienzos al igual ahora era una única unidad, estuvo por varios años dividido en la fracción Norte y la Sur. Pero entre los logros que se atribuye la comisión saliente, que encabezó Sillem, se cuenta justamente el hecho de volver a juntar las dos secciones, separadas en lo físico por el gigantesco nudo vial de ingreso a la ciudad, donde muere la autopista Allende Posse.
Dos sectores, con viviendas de características residenciales ambos, pero con necesidades diferentes.
Contrariamente a lo que muchos piensan, Costa Azul cuenta aún con calles de tierra. El presidente electo, Marcelo Diez, proclamado por la lista única y consensuada que se presentó en la asamblea ordinaria, vive en una de ellas, Lope de Rueda, que ni siquiera cuenta con cordón cuneta.
Tras ese nivel de vida alto que parecen mostrar algunas fincas, complejos y countries cerrados en este sector, se encuentra una nutrida porción de vecinos que viven en forma permanente y que quieren hacer oír su voz debido a las necesidades que atraviesan.
Calles en mal estado, escasa iluminación, el gas natural que no llega y la falta de una sede social donde funcione el centro vecinal, se cuenta entre las prioridades de la agenda de la nueva comisión barrial.
A simple vista las mayores urgencias se ubicarían en sección Norte, donde el alumbrado público, el gas y los patrullajes policiales llegan hasta las primeras cuadras de Av. Sebastian Bach.
“La Escuela Belgrano no tiene gas natural y el country que está enfrente sí, porque antes de irse Emprigas se lo dio a este complejo”, relata como i fuera una paradoja el nuevo titular de la comisión directiva del centro vecinal, Marcelo Diez.
El nuevo dirigente se lamentó de no poder disponer de la que otrora fuera la sede vecinal barrial (en calle Comechingones al fondo) y que el ex intendente Eduardo Conde terminó donando al Club Argentino de Servicios (CAS).
“Entre las opciones que manejamos para tener un espacio propio estaría la posibilidad de que donde está el CAS nos cedan un cuartito para las reuniones. El problema es que ese lugar tiene 2x5 mts.y no cabemos ni la mitad de la comisión”, se lamentó Diez.
El vecinalista se mostró más esperanzado en cambio en las otras opciones, entre las que se contaría ocupar algunas de las fracciones de un descampado ubicado sobre Lope de Rueda, sobre la continuación de calle Padilla, frente a la rotonda y donde actualmente existe una improvisada cancha de fútbol. Allí se podría construir una oficina o salón vecinal.
“Contar con una sede, un techo propio como centro vecinal será una de nuestras metas y queremos llevarle este pedido incluso al propio intendente para que nos ayude”. Diez reconoció también que la indiferencia del vecino es importante en esta zona: “La sede será para que la gente se acerque y participe, transmita sus reclamos y colabore con el barrio, pero para eso se hace necesario que el vecino se involucre, sino todo será más difícil”.
Entre las prioridades que el sector tiene para resoiver, se cuentan, del lado sur, atender el reclamo de un frentista quien habría manifestado en su momento que no estaría permitido el funcionamiento de un corralón-venta de ladrillos (sobre Av. San Martín) que sigue instalado en la zona (y está muy cerca de su casa).
En el área norte, en tanto, la lista es más larga. “El municipio debe instalar un alumbrado público cada 50 metros. Y en nuestro barrio son muy pocas cuadras en la que se respeta eso. Sabemos que el alumbrado naranja, ubicado en el sector sur, cada 30 metros, fue costeado por los propios vecinos, pero el municipio debería responder y hacerse cargo en los sectores donde ni siquiera tenemos alumbrado cada 100 metros”, se lamentó.
Respecto al gas natural que no llega, se mostró sorprendido, ya que en los últimos tiempos las respuestas, las cuales definió como “excusas” fueron variadas. “Mientras la red avanza hacia el sur, para este otro lado se nos dijo, primero, que no podían cruzar Bach porque era una ruta provincial, después aseguraron que había pocos adherentes y finalmente escuchamos que era por problemas de presión. Nos gustaría que se pongan de acuerdo y que se acuerden que prometieron que el gas natural se iba a completar en Costa Azul”.
Respecto a la seguridad, admitió que desde hace tiempo no se escuchan graves hechos contra la propiedad y los vecinos, aunque si dijo que al menos desde hace dos meses “casi no se ve el patrullero”, circular por la zona.
Se lamentó, en otro orden, que a raíz de las obras por la “cloaca máxima”, algunos tramos que se rompieron de Av. Bach quedaron deteriorados y si bien se llegó a admitir las fallas, la promesa de una repavimentación, nunca llegó.
Unida a la cuestión de las cloacas, Marcelo Diez también expresó su preocupación por un arroyo que atraviesa el barrio y cruza por Lope de Rueda: “El agua es cada vez más color marrón y se supone que una vertiente natural no puede tener una coloración así. Estamos muy asustados porque sospechamos que se trata de líquidos contaminantes, aunque no sabemos si cloacales o de lo contrario que provengan desde la zona del basural. Y llamativamente, siempre a las siete de la tarde sube el cauce. Es como si a esa hora el arroyo creciera o bien fueran vertidos los líquidos desde algún lugar”.
Mientras la nueva conducción espera la oficialización municipal de la lista única presentada, para de esta forma iniciar a trabajar por el barrio, se anticipó que la próxima reunión (a la cual están especialmente invitados todos los vecinos), será el lunes 22 de setiembre próximo, a las 19 horas, en el Hotel El Molino.
MAS DE DIEZ…
Acompañan a Marcelo Diez en la presidencia de la comisión directiva, Eugenio Zecchin en la vicepresidencia, Roxana Corradi como secretaria, Daniel Velázquez como prosecretario, Raúl Flores tesorero, Agustín Flores protesorero, Daniel Mottola como 1º vocal titular, Norma Yánez 2º vocal titular, Lorena Blanco 3º vocal titular, Nélida Cocordano 4º vocal titular, Claudio Alcaniz 1º vocal suplente, Pablo Gentile 2º vocal suplente, Gabriela Contesso 3º vocal suplente y Mirta Manquilef 4º vocal suplente. En la Comisión Revisora de Cuentas están: Beatríz Locurero, Rubén Petrucelli y Jorge Montenegro.
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